Texto: Desireé Ramírez.
Fotos: Michel Reyes / Santos Javier.
El primer festival del año en Guadalajara, y nos dimos cita en Terraza Vallarta para disfrutar de la tercera edición del festival Roxy y la experiencia que había preparado a todo su público, esta ocasión decidieron rendirle tributo a los Beatles con la presentación de The Fab Four; esto fue lo que nos encontramos en el Roxy Fest 2019.
Algo nublado el cielo, pero aun así las actividades iniciaron como a eso de la una de la tarde y, aunque no hubiese tanto público a esa hora, el acto de Dan Marshall se apoderaba del escenario Jack Daniel’s para ofrecernos su propuesta musical, dónde covereó a los Beatles con “All my loving”. De ahí nos movimos al escenario Infal AC donde Cobra Kai ya nos empapaba de sus melodías y el sol se acercaba a saludar al recinto.
En comparación a sus anteriores ediciones, se podría decir que este año estuvo algo floja en asistencia, ya que siendo las tres de la tarde aún no se veía el gran flujo de asistentes al que estamos acostumbrados a ver en este festival. Sin embargo, las propuestas musicales entregaban todo de sí. Como podemos revisar en el horario, el escenario con mayor movimiento fue el Jack Daniel’s, pero también fue uno de los menos concurridos durante el día, aquí pudimos encontrar propuesta musicales como Dan Marshall, Centavrvs, Ëda, Les Deuxlexes Goodnight Japan, Fémina, Jade Bird y hasta pudimos escuchar de las charlas con el Desarrollador De Potencial Humano Juan Pablo Pelonsan.
Por la tarde la nostalgia de Nacha Pop reunió en el escenario Converse a la mayoría de los asistentes para corear en unísono su repertorio y, ni se diga cuando interpretaron “Lucha de Gigantes”, que puso a cantar hasta a los que vendían las chelas. En cuanto a la presentación de Soul Asylum no sólo fascinó al público, sino que también nos preparó para el baile que nos esperaba con Future Island, que fue sin duda de las mejores presentaciones del día, abarrotando el escenario de personas dispuestas a bailar junto a Samuel T., quien se mostro conmovido por la respuesta del público a su show. Por su parte Jesse Baez en el otro escenario se preparaba para hacernos bailar mientras recordábamos a nuestros ex amoríos y se comportaba accesible con los fans tomándose fotografías que le pedían.
En el escenario principal, 311 preparaba al público para recibir a Caifanes, quienes atrajeron a sus mas grandes fans y pudimos percatarnos que Saúl Hernández ya no es el vocal que recordamos, porque dejaba que el público cantara a todo pulmón sin preocupación alguna. Esto trajo la consecuencia que cuando Bush subiera al escenario, reclamara a los asistentes qué con Caifanes si coreaban las canciones y con ellos eran más mesurados.
Por otro lado, la presentación que más sorprendió fue la de Robert Delong, que a pesar de que ya se había presentado en el ya extinto Festival Anagrama, muchos lo recibieron como su nuevo descubrimiento musical, y vaya que encanta al publico su manera de combinar instrumentos y customisar los controles de consolas de videojuegos para usarlos como parte de su repertorio.Otra propuesta que llegó para enamorar fue Jade Bird con su agradable voz y su habilidad de conquistar a los demás con su guitarra. Sin duda, las apuestas que se eligieron en esta edición dejaron conformes y sorprendidos a los que tuvieron la oportunidad de seguir estas presentaciones.
Con la banda legendaria de Stone Temple Pilots, se cumplió el gusto del target de este festival y la banda presentó un setlist bueno y desenfrenante. Por último, los hermanos Dewaele prenden la fiesta (ya after a esas horas) y con 2ManyDJS se cierra con broche de oro este festival, que antes de que salieran a hacer bailar a los aftereados, muchos asistentes se preocupaban por que no se llevara a cabo su presentación, ya que conforme se daba la hora de su show la gente iba vaciando el recinto.
No es ningún secreto que el target de este festival es la nostalgia 80ra/90ra o como ellos lo llaman, es el ‘festival chavorruco’, en pocas palabras el festival al que todo tío rockanrolero quiere asistir a pasarla chingón con sus compas y recordar aquellos tiempos de juventud. La apuesta de este festival arriesga para complacer al público que siempre quiso ver a un artista o banda de renombre de aquellos tiempos en la ciudad y que hasta el día de hoy se le hace verla gracias al esfuerzo que ponen los organizadores del Roxy. Sin embargo, el pasado sábado quedó claro que apostarle un poco más al cartel sería una buena opción para llenar el festival, ya que los ‘chavorrucos’ no fueron suficientes para lograr llenar los vacíos de la terraza Vallarta.
Sin duda, los shows más destacados fueron Future Island, Robert Delong, Jade Bird, Jesse Báez y Caifanes, quienes lograron que desapareciera la mitad de los asistentes después de su legendario show. Esto demuestra que la nostalgia no es suficiente y que el público chavorruco está abierto a las propuestas musicales que un festival como lo es Roxy ofrece para ellos. Lo último a destacar es que el horario tuvo modificaciones de última hora y que además la distribución de los shows no fue la más acertada. Al final, la experiencia Roxy fue buena, nos sorprendió, nos enamoró y la pasamos bien, el plus y lo más acertado ante todo es la zona Roxy Kids, que es todo un éxito y que demás festivales deberían seguir el ejemplo de este. ¡Esperamos volver el próximo año!
Coméntanos y califica abajo. ¿Que te pareció la tercera edición del Roxy Fest?
- Las propuestas de Future Islands y Robert Delong.
- Consentir la nostalgia.
- Zona Kids y la selección gastronómica.
- La poca asistencia y la tierra en gran parte de Terraza Vallarta.
- Cambios en los horarios y la distribución de los mismos.
- El cartel y los precios de la comida.