Por Pepe grillo
«Es con inmenso dolor que anunciamos la muerte de nuestro Charlie Watts. Murió pacíficamente en un hospital en Londres hoy rodeado por su familia.”
Este fue el comunicado que subieron a las cuentas oficiales de los @RollingStones este 24 de agosto.
Hay muchas bandas que al nombrarlas, lo primero que se nos viene a la cabeza es el vocalista o frontman, ya que muchas veces es el único miembro que el público ubica por ser el que más sobresale o por ser el centro de atención, pero definitivamente, Los Rolling Stones no es una de esas bandas.
Cuando hablamos de las Piedras rodantes, es imposible solo pensar en Mick Jagger, inmediatamente aparece en nuestra psique las guitarras de Keith Richards y Ronnie Wood y por supuesto, la sobria y elegante manera de tocar la batería de Charlie Watts.
Charlie nunca fue un baterista que le gustara ser muy ostentoso o llamativo a la hora de tocar, no intentaba romper las tarolas a baquetazos ni saturarnos los oídos con frenéticos dobles bombos, Watts era más bien un sutil pero muy elegante y técnico amante de su instrumento. Esta misma actitud la conservó también fuera de los escenarios, en su vida diaria.
«La verdad es que nunca me ha interesado todo eso y todavía no me interesa», le dijo Watts al diario The San Diego Tribune en 1991. «No sé qué es el mundo del showbusiness y nunca he mirado la MTV. Hay personas que solo tocan instrumentos, y me gusta saber que soy una de ellas».
Aficionado del jazz, se enamoró de la batería después de escuchar a Chico Hamilton y fue seducido por el mundo del rock de la mano de Mick Jagger y Keith Richards a principios de los 60.
Charlie Watts formo parte de la banda desde 1963 hasta el día de hoy, ejerciendo el rol de baterista y diseñador de portadas de sus álbumes y escenarios de gira.
Según afirmaciones de Jagger y Richards, Watts era el verdadero líder de la banda.
El número 12 en la lista de los «100 mejores bateristas de todos los tiempos» según la revista Rolling Stone, falleció en un hospital de Londres, según informó su agente. A principios de este mes, el baterista había decidido no ir de gira con la banda, para recuperarse de un procedimiento médico, posiblemente relacionado con su antiguo cáncer.
El día de hoy, el rock está de luto; Y aunque Charlie ha partido de esta dimensión, siempre lo recordaremos como el corazón de la banda, como ese genio que plasmo los latidos de su batería en cada una de las canciones de la banda, y por supuesto, estos latidos se quedaran para siempre en todos nosotros y en la historia del Rock.
R.I.P Charlie Watts.