Texto por: Martín E
Fotos por: Abraham Rodríguez
Entre sentimientos encontrados, tanto de felicidad y éxtasis por vivir dos días llenos de música, como de tristeza y melancolía por ser la última edición en Guadalajara, se llevó a cabo la cuarta entrega de Dreamfields México.
Un festival que durante 4 años nos llenó de momentos inolvidables; experiencias únicas con sus impresionantes escenarios, sus juegos de luces y la dicha que nos dio al traer a Djs de talla mundial que de no ser por Dreamfields jamás hubieran pisado tierras tapatías.
Todo estaba listo, los escenarios montados y como es costumbre una producción impresionante que visualmente, y sobre todo cuando el sol se escondía, llenaban de vida a la fría pero siempre funcional Explanada del Estadio Akron.
El sábado 18 desde las 12:00 pm se abrieron las puertas y poco a poco fueron llegando los dreamers, con toda la actitud y deseo de pasarla bien y bailar hasta más no poder. Entre los presentes logramos ver outfits de todo tipo, unos muy llamativos, otros más atrevidos y algunos más clásicos; desde unicornios, teletubbies, dinosaurios hasta algo más elaborado que reluciera, predominando los colores dorado y plateado que en la noche brillaban a más no poder.
¿Maratńocio? Sí. ¿Emocionante? También. El pasar de un escenario a otro y grabar el momento con tu DJ favorito o simplemente los efectos especiales que se disponían; fuego, papelitos, láser, de todo podíamos ver y disfrutar con actuaciones como las de Meduza, Zatox, Alok, Tchami X Malaa, Gordo y quien se llevó la tarde, Black Coffee.
Pero no todo era música, las actividades y activaciones de los patrocinadores hacían mejor el momento; lugares donde te pintaban la cara, una rueda de la fortuna gigante, las clásicas sillas voladoras y hasta los carros chocones nos mantuvieron entretenidos y felices de principio a fin.
Para el segundo día la cosa no cambió mucho; los actos más esperados se harían presentes pero el ambiente sería el mismo; más outfits dignos de destacar acompañados de un clima más fresco y cooperador.
Había que llegar más temprano para hacer lo que quizás no alcanzamos a hacer la noche anterior o bien ver a uno de los talentos que lo daban todo en todos los escenarios. El MainStage nos entregó actos como el de Jesica Audiffred, D-Sides, Indira Paganotto y un combo que hizo que pocos se movieran de su lugar conformado por Ben Nicky, Purple Disco Machine, Fisher y Vintage Culture.
Que joyas de actos. Mención aparte a Purple Disco Machine, quien con su estilo ochentero nos puso a bailar por más de una hora; así como para Fisher, que desbordó energía, armando una buena fiesta, esa fiesta que por cuestiones del destino ya no viviremos en nuestra ciudad.
Y como todo lo bueno tiene que terminar alguna vez. Entre fuegos pirotécnicos finalizó Dreamfields México 2023.
Una lástima que eventos de esta magnitud, de este alcance y que reúnen a personas de muchas nacionalidades reunidas con un solo fin y en forma pacífica se tengan que ir de nuestra ciudad; nos encantaría que fuera todo lo contrario, que más festivales de todos los géneros volteen a ver a Guadalajara como una sede ansiosa e interesada de formar parte de espectáculos que solo vemos en otras latitudes.
Por lo pronto, solo nos queda decir. ¡GRACIAS DREAMFIELDS!,
Gracias por hacernos soñar, por hacernos vibrar y por hacernos parte de uno de los festivales de electrónica más importantes del planeta.
Coméntanos y califica abajo.
¿Qué te pareció el Festival Dreamfields México en la Explanada del Estadio AKRON?
- Los impresionantes escenarios.
- La iluminación y entrega de todos los DJ.
- El público; su energía, sus vestuarios y su disposición.
- Es la última edición en Guadalajara.