- Jamie XX y su buen set
- Iluminación que acompañaba acorde a las canciones
- 3 horas esperando a que saliera Jamie XX, ni modo así es su set
Texto y fotografía: Diego Reyes
Por segunda vez nuestra ciudad tuvo el placer de recibir a uno de los DJ-productores más reconocidos del Reino Unido gracias a nuestros promotores-amigos, Mousiké. El brazo derecho de una banda emblemática del indie-alternative-electronic, The XX, así es, nos referimos a Jamie XX. Mucha gente de Guadalajara desconocía la participación de Jamie durante los años de trayectoria que ha tenido dicha banda, cuando les platicabas que el era miembro de esta agrupación, les provocaba una mueca de emoción, impresión y ganas de verlo en vivo.
La cita comenzó desde las 10:00 pm. Donde la imponente Mansión Magnolia se veía poco a poco más a tono en cigarros, cerveza holandesa y tequila mexicano. Una mezcla de diferentes culturas y tribus urbanas estaban para un mismo fin: escuchar un live act de Jamie.
Tras un poco de impaciencia del público, más por los que querían irse a dormir temprano, a la 1:10 pm, Jamie XX, comenzó un set que despojó los sentidos, movió a bailar a los casi 600 asistentes y que indudablemente impresionó por su naturalidad y tranquilidad con las que maneja sus tornamesas, mezcladora y sus discos vinyl.
Presentando su nuevo álbum de estudio «In Colour» la noche y pista se convirtió en la fiesta perfecta, con las personas perfectas y el ambiente perfecto. Manos, brazos y cabezas siguiendo el ritmo natural de la música, se sentía cómo se vivía un «trance» de sonidos en cada uno de los asistentes. Entre su set escuchamos desde lo más nuevo, lo más esperado y lo más movido con «Gosh», «Sleep Sound», «Open Eye Signal» y el cover a una increíble banda que es paisana de Jamie con «You’ve got the love» de Florence and the Machine.
Tras 2 horas de música, el final de una noche épica, esas que solamente se viven en Mansión Magnolia, Jamie XX dio punto final a su presentación no sin antes hacer señas de agradecimiento al público tapatío que esperaba este gran día y que la misma embriaguez hacía olvidar la desvelada que les esperaba.