Texto: Oscar Rojas
Fotografía: Melissa Grijalva
«Viva Latinoamerica” gritaba el público, mientras Nicolas Jaar, con un aire desinteresado pero enfocado, movía los cuerpos de cientos de personas al son de su música. El artista neoyorquino, de origen chileno, es conocido por sus mezclas ambientales, lentas y llenas de textura, que transmitió a su público de una manera increíble.
Su más reciente álbum Sirens, aclamado por la crítica y su público contiene mensajes políticos fuertes y claros, que acompañados de su música con influencia latina, hicieron que su público se identificara y sintiera las canciones junto con él. Su set empezó con sonidos subversivos, ligeros, hasta que el entro con su saxofón y toco una rendición de la 2da canción de su álbum Sirens, llamada The Governor. El público de empezó a mover y las emociones empezaron a florecer. Nicolas Jaar se veía como pez en el agua, en su hábitat, tocando sus saxofón, mientras la melodía y el beat de la canción se elevaban. El saxofón sono como sirenas, de un movimiento que inevitablemente estaba viniendo hacia nosotros.
Después llego el himno de la revolución, el mensaje central de Sirens y de su set; la canción No, canción que canto con propia voz en vivo. “Ya dijimos No, pero el Si esta en todo, lo de adentro y de fuera, lo de lejos y de cerca”. El ritmo latino de esta canción es infeccioso y se sintió el cambio de mood en el público; todos nos empezamos a mover al ritmo, en unísono, cantando con él. “No hace falta ver el futuro, para saber lo que va a pasar”. Es un mensaje político, de cambio, de acción, acción que se dio paso en el concierto. El público llego a la euforia; gritos, chiflidos, gente brincando de emoción. Se sintió la energía del cambio, de una revolución que esa noche paso en el Teatro Estudio Cavaret, pero que lentamente esta llegando a más partes del mundo.
En un momento, Nicolas Jaar se fue, lo que dejo al público confundido, pero después de cinco minutos volvió, y dijo “Gracias”, seguido de una rendición de una canción llamada Swim de su colección de sencillos Nymphs. Esta canción, guiada por un sintetizador sutil y un bajo estremecedor termino de sacudir toda la emoción de los asistentes hasta dejar a todos exhaustos, de tanto sentir y disfrutar.
Seguido de esto, desaparece, las luces se encienden, y todos buscan algo. A una persona, la salida o un significado de lo que acaban de escuchar. El mensaje fue fuerte y claro; con su música, Nicolas Jaar busca que nosotros busquemos los No y los Si, y cambiarnos. Saliendo, yo seguía escuchando a sus sirenas cantar.
Comparte tu opinión ¿Qué les pareció el regreso de Nicolas Jaar y su nuevo disco?
- Set de dos horas, que contuvo varias canciones de toda su discografía
- El manejo de luces fue fantástico.
- La instrumentación y uso de su propia voz en vivo, que le dio otro toque a las canciones.
- El lugar era un horno.
- La barra de bebidas estaba muy retirada.
- Elementos de seguridad empujaban y se metían entre el público, dañando la experiencia de varias personas.