Texto por: Miguel Preciado
Imágenes por: Edson Wong
Ya son siete años de la última visita de Hot Chip como full band a la ciudad, después de aquel show en Calle 2 en 2012 y a dos años del desangelado DJ Set que tuvieron a pleno rayo de sol en el Roxy 2017 y como era de esperarse, cuando su anunció su regreso fue un hype en el calendario para fin de año de las y los amantes de conciertos.
Junto al anuncio, se levantaron bastantes dudas por el venue, extrañando a varias personas el hecho de retomar el BMLS como opción para un concierto, teniendo los antecedes de shows del género con comentarios de sonido precario, organización y mala acústica, como lo fueron las fechas de MSTRKRFT, GusGus o Phantogram.
Pero eso no le importó del todo a los fans que esperaban a la banda mientras sonaba un ameno set de Dan Solo, artista invitado, que con toques de house, electro y un poco de funk hizo de la espera un lapso corto para recibir a los de Londres.
En ocasiones muchas personas no entienden el porqué este tipo de agrupaciones tienen fans tan aguerridos, pero si recordamos que James Murphy (LCD Soundsystem) fue su impulsor al éxito, reclutándolos para la DFA Records, discográfica con nombres como Holy Ghost!, Juan MacLean, Hercules Love & Affair y The Rapture en sus filas, podemos recordar que las bandas de electrónica y guitarras “bailables” son tan queridas en nuestro país que Hot Chip no podría ser la excepción.
Engalanados con diversos disfraces y pintados de calaveras haciendo alusión al día de muertos, los cincos integrantes y músicos de esta gira, subieron al escenario para saludarnos y agradecer nuestra asistencia y así arrancado con “Huarache Lights”, haciendo un combo doble de tracks de su disco “In Our Heads” con “Night & Day” y “Flutes”, los asistentes tomaban la energía necesaria para el baile.
En esta gira Hot Chip le está dando prioridad a la difusión de su nuevo disco: “A Bath Full of Ecstasy” y la canción más aplaudida de esta producción sin duda fue “Hungry Child” que seguramente se convertirá en un clásico con el pasar de los años, “Spell” y “Positive” también tuvieron una positiva respuesta, mientras Owen el tecladista, no paraba de bailar y brincar en su lugar contagiando las vibras a las personas más cercanas al escenario.
“Over & Over” retumbó el lugar, la misma que fue premiada en el 2006 por la NME como canción del año ganándole a nombres del nivel de Amy Winehouse, Arctic Monkeys y Peter, Bjorn & John. “Ready for the Floor” marcaba lo que parecía el último gran momento de la noche, cuando los Británicos se despidieron, pero el encore sería otra dosis de beats con la melancólica “Need You Know” y el curioso detalle de romper una piñata sobre el escenario cuando sonaba “I Feel Better”, la canción que ahora si indicaba el final de la noche y nos hacía aplaudir.
En esta ocasión el audio del venue no fue tan malo como en otras, la logística quizá dejó un poco a desear en cuestión de la compra de bebidas, al igual que esa innecesaria separación de zonas General A y B, se apostó por el venue, pero si quedó bastante austero, justo como se le recordaba, se debe trabajar mucho para convertirlo en un punto obligado de las bandas/promotoras.
De lo que si estamos seguros es que las y los seguidores de Hot Chip tuvieron un decente show después de tantos años sin una visita y como la banda lo canta, estuvimos: “We’re ready, we’re ready for the Floor”.
Coméntanos y califica abajo. ¿Qué te pareció el concierto de Hot Chip en el BMLS?
- El regreso de Hot Chip a Guadalajara.
- Puntualidad del concierto.
- Mejora en el audio en comparación con shows anteriores en el venue.
- La larga fila para comprar bebidas.
- Mediana asistencia.
- Separaciones de público en un área general de pie.