Por: Diego Reyes
Fotografías: Ever González
Bring me the Horizon desafió a Guadalajara y los tapatíos respondieron con un concierto épico.
No cabe duda que la ciudad de Guadalajara cuenta todavía con un gran número de seguidores del género «scremo», «metalcore» y «deathcore». Así lo evidenciamos el pasado domingo 13 de marzo donde cerca de 2,800 personas se dieron cita en el Teatro Estudio Cavaret para presenciar el regreso de la banda británica a tierras tapatías. En seguida les platicaremos un poco de cómo estuvo el show:
Quiero iniciar con un dato interesante que escuché de 3 fanáticos que tuve la oportunidad de llevar a sus casas, ellos, comentaron que cerca de 200 personas acamparon desde el día sábado por la mañana en las puertas del Cavaret, para poder sobrevivir a esta odisea de dormir en la calle. Se turnaban para apartar los lugares de los fanáticos más arriesgados. Así, el club de fans y demás campistas podían descansar, ir a comer o despejarse sin tener que perder su lugar.
Es así como desde las 06:00 pm, la gente ya comenzaba a ingresar al ya reconocido Cavaret para apartar su lugar al filo de las vallas de seguridad frontales o en los escalones traseros para los de baja estatura. Con una fila interminable, que terminó hasta casi las 8:30 pm en despejarse de Parres Arias y Periférico.
Cerca de las 08:15 para calentar los motores con un poco de sonidos y beats industriales que generaban miles de gritos y saltos de los asistentes. Acción que demostraba la emoción y euforia por percibir los sonidos más cercanos de la banda por la que habían esperado tanto tiempo ver en vivo, Bring me the Horizon.
Minutos después de las 09:00 pm, la música de fondo se apagó para dar inicio a una serie de gráficos visuales que se proyectaban en dos pantallas laterales que anunciaban el inicio de lo que fue para muchos, el mejor concierto de su año. Con sonidos introductorios de «Doomed» fue como Oliver “Oli” Sykes en la voz principal, Matt Kean en el bajo, Lee Malia en las guitarras, Matt Nichols en l batería y Jordan Fish en los teclados y coros se presentaban ante un público que no dejaba de gritar por el éxtasis de verlos en vivo.
Con un repertorio de canciones como «Happy Song», «Go To Hell For Heaven’s Sake», «House Of Wolves», «Chelsea Smile», «Throne», «Shadow Moses», «Sleepwalking» pertenecientes de sus más antiguos discos y de su nuevo material que presentaron llamado “That’s The Spirit» el concierto fue tomando forma y sin lugar a duda expresión y entrega del público; público que no dejaba de cantar canción por canción y aplaudir y gritar en el término de cada interpretación de Bring me the Horizon.
Oli Sykes en momentos interactuaba con el público para invitarlos a ondear las manos o simplemente saludar al público con un «Thanks so much Guadalajara, México». Saludo que el público agradecio y contestó de la mejor manera con gritos exaltados y repetitivos: «Bring me, Bring me, Bring me».
Tras casi una hora de concierto la banda generó su propio Encore para regresar con las canciones más potentes que el público esperaba escuchar y gritar. Nos referimos a «Blessed» y «Drown» . Piezas e interpretaciones que los miles de tapatíos y cientos de foráneos agradecieron con un gran aplauso hacia la agrupación británica. Si por algo dijimos que el público se entregó completamente, fue por las gotas de sudor y el calor intenso que se generó dentro del recinto.
¡Checa aquí la nota de cómo se puso el concierto de Monterrey y la Ciudad de México!
Coméntanos y califica abajo ¿Que te pareció el concierto de Bring Me The Horizon?
- La entrega del público
- La atención médica para las personas lastimadas
- Lleno total en el Cavaret.
- El calor sofocante que se generó