Texto y Fotos por: Sunny Muñoz
El aire en el Candelabrum Metal Fest está impregnado de una energía casi palpable, un fin de semana donde el metal resuena en cada rincón. En su cuarta edición, el festival se ha vuelto a consagrar como un pilar fundamental de la escena metalera en México, brindando una experiencia sonora que trasciende las dimensiones del género.
Candelabrum: El Festival que Mueve a México en el Metal
Durante toda la previa al festival, nos damos cuenta como de todos los estados del país se mueven metaleros para llegar el bajío a vivir este evento y bueno, también tenemos que mencionar que llegan de Sudamérica y Estados Unidos, Candelabrum mueve a los mexicanos por esa seguridad que da en su excelente organización.
El lugar ya conocido, La Velaria de La Feria de León, que este año se apreció que sea techado, ya que el primer día llovió de repente. Esta vez se separaron los accesos según la zona, con eso se agilizó más el ingreso de los asistentes.
La zona general y preferente, dan acceso al frente del escenario, la terraza VIP para los que querían sentarse a descansar.
Muy buena limpieza de los baños en las dos zonas.
La zona de comida, cumplió, sigue siendo muy altos los costos, aunque ya hay más variedad y también opciones veganas.
El Metal Market, lugar en donde podrás encontrar accesorios, playeras, parches, tazas, joyería, discos y todo lo que tiene que ver con bandas y accesorios metaleros, siempre estuvo transitado por personas haciendo compras e incluso intercambiando material musical.
Dos zonas con mercancía, en donde podíamos encontrar mercancía oficial del festival y de todas las bandas.
Campañas Sociales en Candelabrum
Este año, el festival ha brillado con dos hermosas campañas sociales. La primera, uniendo corazones para donar alimentos y recursos a perritos necesitados, en colaboración con Brigada Canina, a cada donador le regalaban un vaso del festival.
La segunda, «Héroes sin mata», donde se recolectan donaciones de cabello, si varios metaler@s se cortaron sus largas cabelleras para donarlas y crear pelucas oncológicas destinadas a niños y niñas con cáncer, junto a ALUCCA, recibiendo un reconocimiento por la asociación.
Día 1: 6 de septiembre de 2025
A las 12:00 del día, un estallido sonoro marcó el inicio de un festival que prometía sumergirnos en un universo de riffs y melodías. Con el telón de fondo que decía “CANDELABRUM”, el talento nacional se adueñó del escenario. Las vibrantes presentaciones de Anticolor, Unholier y Fumes fueron solo el preámbulo de lo que se avecinaba, una cálida invitación que nos hizo transitar de la rutina a la intensidad del sonido.
A medida que caía la tarde, el festival se nutría de espectadores, cada uno listo para ser poseído por el hechizo de las bandas internacionales que iban desfilando sobre el escenario.
Fossilization se adueñó del ambiente con su oscuro y malévolo Death Metal, mientras que Zemial nos transportó hacia las tinieblas del black metal, envolviendo nuestras almas en una atmósfera tenebrosa.
Eclipse, debutando en el país, cautivó a todos con su hard rock melódico; su energía era contagiosa, y el público se entregó por completo. De Helsinki llegó Shape Of Despair, cuyo sonido funeral doom nos arrastró hacia un abismo de melancolía profunda.
A pesar de la ausencia de su vocalista, Ancient Rites conectó brutalmente con su sonido oscuro, dejando una marca indeleble en los presentes. Morbid Saint hizo vibrar el recinto con un thrash auténtico, mientras que Hällas asombró con su progresivo estilo, deslumbrando a todos.
3rd and the Mortal brindó nostalgia con su debut en México, antes de que Repulsion aniquilara todo a su paso con un slam devastador. Finalmente, Covenant cerró la noche con un espectáculo brutal y elegante, con un talento mezclado de varias bandas legendarias del metal, cerrando la noche de una manera épica y así culminando el primer día del festival.
Día 2: 7 de septiembre de 2025
Desde las primeras horas de la mañana, la Velaria se llenó de energía y pasión por el metal nacional. En este segundo día, las bandas Summoning Death, Black Hate y Split Heaven no solo marcaron el compás, sino que también elevaron la emoción de los asistentes, quienes ya clamaban por más.
El talento internacional comenzó a desbordarse con A Canorous Quintet, un legado sueco que trajo consigo la crudeza del death metal, seguido por Pyogenesis, cuyo death doom resonó profundamente en los corazones enardecidos.
Necrot fue el verdadero apocalipsis: su aterrador set de 666 toneladas de death metal arrasó con todo a su paso, dejando al público en un estado de trance.
La masacre continuó con Onslaught, cuyos riffs de thrash británico hicieron temblar los cimientos de La Velaria.
Tygers of Pan Tang rugió con una intensidad que pocos pueden igualar, su heavy metal resonando como un grito de guerra. The Crown, con su poderosa propuesta, voló cabezas y provocó una euforia colectiva.
Primordial ofreció un espectáculo inolvidable, fusionando black metal y folk metal de forma magistral, mientras que Absu dejó una huella intensa con su mezcla de thrash y folk celta.
Agalloch nos sumergió en un abismo de melancolía, conjurando un universo sonoro que abarcaba desde el post-rock hasta el doom.
Finalmente, Obituary, los monstruos del death metal, desataron un cierre brutal. Los círculos de slam se formaron en el centro, creando una atmósfera inolvidable que selló esta cuarta edición en la memoria de todos los presentes.
Coméntanos y califica abajo.
¿Qué te pareció la cuarta edición del Candelabrum Metal Fest?
- La organización.
- Excelente logística y lugar.
- Las camapañas sociales y la exposición de arte.
- Algunas mínimas fallas de sonido.
- Altos costos en la comida.