Texto por: Miguel Ramírez
Fotos por: Fanny López
El Conjunto Santander, majestuoso e iluminado, se encontraba lleno debido a que había más eventos aparte del de Alexa Tarantino. Aun así, el personal fue muy amable y siempre estuvo atento con los asistentes. El escenario estaba solitario e iluminado con luces tenues, creando una atmósfera íntima que era perfecta para sumergirse en la magia del jazz.
A las 9:00 PM, con el público expectante llenando la sala 2 con entusiasmo, los músicos salieron uno a uno al escenario. Alexa tomó su saxofón con gracia y comenzó a deleitarnos con melodías cautivadoras que llenaron el espacio con su dulzura y fuerza. A su lado estaba su cuarteto, conformado por un pianista sentado al piano de cola, un contrabajista y, por último, un baterista con una sonrisa de oreja a oreja. Todos seguían a Alexa en la melodía.
Cada nota que salía del instrumento de Alexa era como un susurro al corazón de los asistentes. Su destreza y técnica impecable se manifestaron en cada acorde, envolviendo al público en una experiencia musical inolvidable. Los solos de saxofón, contrabajo, piano y batería resonaban con una pasión desenfrenada, arrancando aplausos y ovaciones de admiración cada vez que terminaban una pieza.
La velocidad de los dedos del pianista era asombrosa, al igual que la destreza del baterista. Y como si fuera poco, se notaba lo increíble que el contrabajo guiaba a toda la banda hacia el éxtasis musical. El dominio de la banda y su capacidad para improvisar sorprendieron a todos los presentes, llevándolos en un viaje emocional a través de las diferentes texturas y ritmos del jazz.
El escenario cobró vida con la complicidad entre Alexa y los demás músicos de su banda. La interacción y el diálogo musical entre ellos generaron momentos mágicos de sincronía y armonía. Los solos de piano se entrelazaron con las melodías del saxofón, creando una sinergia musical que envolvía a todos en una atmósfera de pura pasión y emoción.
Alexa le preguntó a los espectadores qué tipo de canción querían que interpretara como la última pieza. Dijo: «Tenemos dos canciones para terminar la velada y queremos que ustedes escojan. Puede ser una canción con mucho swing, casi bailable, o tenemos una canción muy romántica. Escojan aplaudiendo». Ganó la canción romántica llamada «La Puerta», que Alexa interpretó con la flauta.
El concierto culminó con una ovación de pie por parte del público, que no pudo contener su admiración y gratitud hacia Alexa Tarantino y su banda. Sin embargo, regresó para el encore y culminó con una última canción con mucho swing (Hacer un encore en un concierto de jazz en el Conjunto es muy extraño).
Sin lugar a dudas, Alexa Tarantino es una grandiosa artista del saxofón e instrumentos de viento que cautiva con su habilidad en el escenario y su presencia magnética. Su concierto fue una experiencia inolvidable que nos recordó lo mágico que puede ser el jazz y nos dejó con ansias de más.
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¿Qué te pareció la presentación de Alexa Tarantino en el Conjunto Santander?
- El sonido de la sala 2
- La atencion del staff
- La cerveza y alimentos está a un precio razonable.
- Estuvo algo solo
- La sala de espera estaba algo llena